La Panadería Almendra es una empresa familiar. Fue creada por dos hermanos Víctor y Rosana. Ambos emprendieron este proyecto acompañados de sus cónyuges Karina y Fernando.
Es una empresa pequeña, que, en cuanto a su complejidad, podemos
enmarcarla dentro de las organizaciones planas, ya que no tiene niveles
jerárquicos, la comunicación es informal, los miembros se relacionan en
persona, y la toma de decisiones está centralizada en los propietarios.
Esta empresa, entonces,
se encuentra en la etapa de la generación del fundador. En este caso se trata
de dos fundadores, que se unieron en una sociedad comercial, con la finalidad
de crear una empresa de producción acorde a sus expectativas. Ellos tenían el
claro objetivo de instalar la empresa en el mercado, y la firme esperanza de su
permanencia en el tiempo para sustentar la educación de sus hijos/as y de ser
posible que ellos continúen con el desarrollo de la misma.
Si bien abrieron sus
puertas hace nueve años, y la empresa todavía es pequeña, sus fundadores tienen
una clara visión de crecimiento y una enorme capacidad de trabajo que los ha
llevado a superar los obstáculos que se les han presentado.
Uno de los mayores
obstáculos que tuvieron que afrontar, a medida que fueron creciendo e
incorporando empleados, fue aprender a delegar la realización de ciertas
tareas, como la elaboración de algunos productos. Según refiere uno de los
socios: “es lo que más le cuesta”, porque “nadie hace las medialunas como yo”
afirma, “por más que les enseño todos los pasos”.
Por otro lado, todos
los integrantes de esta familia, como socios de esta empresa, han tenido que
aprender a compartir el poder y a tomar decisiones en forma conjunta, tratando,
en lo posible de no alterar la armonía familiar. La cuestión era, para ellos, separar
la empresa de la familia, es decir, no llevar al trabajo las discusiones
familiares o a la familia las discusiones de trabajo. Y esto, según Rosana, es otro
de los obstáculos que tienen que sortear todo el tiempo, porque “se les hace
difícil separar”.
En el relato de la
historia de la Panadería, identificamos, además, crisis o conflictos
relacionados con la toma de decisiones. Conflictos, que, aunque entre hermanos
son inevitables, han tenido que ver específicamente con la diferencia de
criterios a la hora de determinar algunas cuestiones, como turnos del personal,
reformas del establecimiento, tareas a desarrollar u horarios que va a cubrir
cada familia, entre otros.
Los socios refieren
que, con el transcurso del tiempo han aprendido a manejar estos conflictos, han
sido capaces de escucharse, respetarse y evaluar todas las ideas, o ponerlas en
práctica, de manera momentánea, aunque alguno no esté de acuerdo, para probar
como resultaba.
Respecto de la
bibliografía, observamos que, si bien la empresa está en la primera etapa del
ciclo de vida, comparte o tiene características comunes a la cuarta etapa,
aquella en la que la segunda generación debe aprender a compartir el poder en
materia de decisiones.
Muyyyy bueno graciassss totales
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